¿Por qué es importante el juego en la primera infancia?
El juego es una actividad imprescindible en el desarrollo de los seres humanos que lejos está de ser tan solo un pasatiempo.

Jugar es explorar. Es aprender sobe el mundo, sobre uno mismo, sobre el otro y sobre la vida. Lejos de ser tan solo un pasatiempo, el juego es una actividad fundamental para el desarrollo de las personas. Se vincula con el apego, las relaciones con los pares y el aprendizaje de habilidades. Como en otras actividades cotidianas, el juego va evolucionando conforme el niño o niña crece.
Para el bebé chiquito, el mejor juguete es otro ser humano. Disfruta mucho de que lo mimen, que lo toquen, que le hagan ruidos. ¡Y aprende mucho con esos juegos! Hasta que a esos juguetes humanos les suma otro: su propio cuerpo. De esa manera, comienza a gustarle cómo se mueven sus manos, qué pasa cuando mete sus dedos en su boca y se impresiona cuando escucha sus propios sonidos.

Ideas y tipos de juegos para la primera infancia
- Materiales para expresión plástica (óleos, marcadores gruesos, etc)
- Juguetes que estimulen el juego simbólico: recipientes de diferentes tamaños, frutas, verduras, set de medicina, cunas, muñecos, camiones, etc. de mentira.
- Aros de colores, pelotas, tableros sensoriales.
- Libros con muchas ilustraciones y poca narración.
- Títeres para estimular la fantasía y expresión oral.
Con el paso de los meses, y a medida que adquiere habilidades motrices, comienza a disfrutar la manipulación de objetos seguros. Esos objetos deben ofrecerle colores, sonidos y texturas para poder explorar. Es fundamental que estén limpios porque la boca seguirá siendo un buen lugar de exploración. También le gustará estar con los demás integrantes de la casa para seguir las actividades que realiza la familia.
Con el gateo, el mundo se amplía y se vuelve mucho más atractivo. Es importante tener en cuenta el cuidado de zonas peligrosas como escaleras, puertas, lugares con cables u objetos que puedan lastimarlos. Al principio será necesario esconder ciertos objetos. Luego el “no” cobrará relevancia y significado, y será suficiente para que entienda a qué puede y qué no puede acercarse.
¿Y cuando son mayores?
Pasados los 2 años, queda más claro lo que les gusta a los niños y lo que no. Esto da la oportunidad de estimular sus inclinaciones naturales, ya sea por la música, la actividad física, los juegos de armar, que puedan despertar otras preferencias que aún no descubrieron. Es bueno que los niños tengan actividades variadas que involucren diferentes habilidades: artísticas, motrices, intelectuales y la imaginación.

Como están en una etapa de fuerte identificación y exploración del mundo adulto, suelen disfrutar al imitarlo: hacen de cuenta que se afeitan, que cocinan o que van a trabajar. También disfrutan de “transformarse” en otro. Los disfraces les fascinan y pueden sentir que son un superhéroe o superheroína solo por ponerse una toalla como capa.
Leerles cuentos o inventarlos para ellos, tener siempre disponibles crayones y papel, acompañarlos con música favorecen muchos aspectos de su desarrollo y les revelan fuentes de placer que les serán provechosas para toda la vida. Los juguetes frágiles, con muchas piezas o muy caros, no son una buena opción a esta edad, en la que tienen una imperfecta capacidad para manipularlos con cuidado y gran afán exploratorio.
El exceso de juguetes y actividades, lejos de estimular, debilita la creatividad, la motivación y la capacidad de disfrute. El uso del tiempo libre sin planes prefijados los enfrenta a desarrollar algo muy importante para su vida: la capacidad de entretenerse solos.
Sigamos evitando las pantallas
Al bebé no le hace bien estar expuesto a televisores o pantallas porque pueden afectar el desarrollo de su cerebro. Exponerlo a la televisión está relacionado con un mal funcionamiento de su capacidad de mantener la atención frente a estímulos menos intensos o menos rápidos, lo que puede ser una importante interferencia para su futuro rendimiento escolar y relacionamiento social
¿Por qué es bueno que los niños se aburran?
A veces parece que cuantos más juguetes o más actividades realicen, mejor para niños y niñas. Sin embargo, el exceso de ambos, lejos de estimular, debilita la creatividad, la motivación y la capacidad de disfrute. El uso del tiempo libre sin planes prefijados los enfrenta a desarrollar algo muy importante para su vida: la capacidad de entretenerse solos. Es importante tener en cuenta que aburrirse también es una opción y colabora en estimular la imaginación.
¿Por qué es tan importante el juego? ¿Qué genera en el niño o niño y en los adultos? ¿Qué pasa cuando aparece el aburrimiento? Natalia Oreiro responde esta y otras preguntas en este video.