Cómo prepararse para los huracanes o tifones
Consejos para proteger a tu familia en caso de ciclón
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Además de causar importantes daños, los ciclones provocan miedo e incertidumbre. Sigue nuestros consejos para ayudar a tu familia a protegerse y estar preparada.
Información sobre los ciclones
¿Cuál es la diferencia entre un huracán y un tifón?
Tanto los huracanes como los tifones son ciclones tropicales. Lo único que los diferencia es su ubicación, es decir, el lugar en el que se producen.
¿Qué es un ciclón?
Un ciclón es un fenómeno meteorológico extremo que se produce cuando el viento gira alrededor de un centro de baja presión atmosférica sobre aguas cálidas.
¿Qué es un huracán?
Un huracán es un ciclón tropical que se forma en el Océano Atlántico con vientos sostenidos de 119 kilómetros (74 millas) por hora como mínimo.
¿Qué es un tifón?
Un tifón es un ciclón tropical que se forma en el Océano Pacífico con vientos sostenidos de 119 kilómetros (74 millas) por hora como mínimo.
Cómo prepararse para un ciclón tropical
Habla sobre los ciclones con tu familia
Si vives en una zona de riesgo, habla con tus hijos sobre cómo son estas tormentas y explícales que harás todo lo posible para que estén a salvo. Utiliza un lenguaje adaptado a su edad.
Prepara tu hogar
- Guarda dentro de la casa todos los objetos que estén en el exterior, como muebles, juguetes o herramientas.
- Revisa el techo, las puertas y las ventanas de tu casa para detectar cualquier posible daño, y realiza las reparaciones necesarias.
- Si puedes, instala contraventanas resistentes a las tormentas o cubre las ventanas con paneles de madera contrachapada y protege todas las puertas.
- Limpia los canalones o desagües para evitar que el agua se acumule.
Elabora un plan
La preparación ayudará a todos los miembros de la familia a permanecer juntos y a salvo durante una emergencia. Si vives en una zona de riesgo, deberías repasar el plan de seguridad con tu familia una vez al año.
- Prepara un “kit de emergencia” con alimentos no perecederos, medicamentos, dinero en efectivo, un botiquín de primeros auxilios, una linterna, pilas y agua para varios días, ya que quizás tengas que abandonar tu zona o los servicios queden interrumpidos. Incluye también cualquier otra cosa que pueda necesitar tu familia.
- Coloca los papeles importantes, como los documentos de identidad, en un lugar alto o dentro de algo que los proteja del agua (por ejemplo, una bolsa de plástico con cierre) para reducir el riesgo de que sufran daños. También puedes guardar en bolsas de plástico otros artículos importantes, como los uniformes de la escuela.
- Habla con la escuela de tus hijos para conocer su plan en caso de ciclón.
- Habla con los demás adultos de la familia y con los niños y niñas mayores sobre la vía de evacuación que utilizarán si llega a ser necesario. Fijen un lugar seguro donde puedan reunirse o donde se encuentre el refugio que se les haya asignado, y prevean qué hacer si en algún momento se separan.
- Ayuda a los niños y niñas a memorizar algunos datos básicos o anótaselos en un papel. Por ejemplo, su dirección, los nombres de sus cuidadores y los números de teléfono importantes.
- Si vives en una zona que puede sufrir inundaciones, encuentra un lugar que te permita situarte a una altura más elevada.
- Ten en cuenta a los niños y niñas u otros miembros de la familia con discapacidad y piensa cómo podrías cubrir sus necesidades.
Qué hacer durante un ciclón
Escucha a las autoridades locales
Presta atención a la emisora de radio o a las noticias locales para conocer la evolución del tiempo y los consejos oficiales. Si las autoridades recomiendan una evacuación, sal de inmediato con el kit de emergencia y tus documentos de identidad. Si lo que se aconseja es permanecer dentro de los hogares, mantén la calma, no salgas de casa y aléjate de las ventanas.
Protege tu hogar
Si la evacuación es necesaria y puedes hacerlo sin correr riesgos antes de marcharte, desenchufa los electrodomésticos y cierra todos los suministros, como la electricidad, el gas y el agua.
Transmite seguridad a tus hijos
Repasa con tus hijos el plan de emergencia y explícales que la familia ha tomado las medidas necesarias y está preparada. Descríbeles lo que es un ciclón con un lenguaje adaptado a su edad y anímalos a preguntar todo lo que necesiten. Diles que están a salvo y que estás ahí para ayudarlos.
Informa a tus seres queridos
En cuanto llegues a un lugar seguro y los canales de comunicación estén disponibles, informa a los demás miembros de tu familia o a tus allegados.
Qué hacer después de un ciclón
Sigue informándote
Antes de volver a salir o de regresar a tu hogar, espera a que las autoridades locales declaren el fin de la alerta para desplazarte solamente cuando sea seguro. Los ciclones pueden provocar importantes daños en los edificios, y en infraestructuras como las carreteras y los tendidos eléctricos. Además, van acompañados de fuertes lluvias que pueden causar inundaciones y aumentar el riesgo de que se propaguen enfermedades transmitidas por el agua, como el cólera y la fiebre tifoidea.
Sigue protegiendo a tu familia
- Mantén a toda la familia alejada de los cables sueltos y de las estructuras que no sean seguras.
- Si se han producido inundaciones, no dejes que tus hijos se acerquen al agua de la crecida, ya que es muy posible que esté sucia y contaminada.
- No permitas que tus hijos jueguen cerca de los escombros, podrían hacerse daño.
- En la medida de lo posible, vístete y viste a tus hijos con ropa abrigada y seca.
- Bebe solamente agua que proceda de fuentes seguras y asegúrate de que la comida está bien cocinada. No consumas alimentos que presenten daños o que hayan podido estropearse por los cortes de energía.
- Lávate las manos antes de comer y después de ir al baño, y asegúrate de que tus hijos también lo hacen.
- Consulta a un médico de inmediato si observas señales o síntomas de enfermedad en algún miembro de tu familia.
Limpia con cuidado
Ten cuidado si tienes que bombear agua fuera de tu casa. Hazlo despacio y presta atención a los posibles peligros, como los escombros y los cables eléctricos. Si puedes, seca todo lo posible en un plazo de entre 24 y 48 horas, mantén bien ventiladas las zonas que estén húmedas y desecha todo lo que no se pueda secar o arreglar.
Limita al máximo la participación de tus hijos en la limpieza. Para que los niños, niñas y jóvenes puedan regresar a casa sin correr ningún peligro, limpia y desinfecta los juguetes, la ropa y las habitaciones. Si se ha producido una inundación, desecha todas las pertenencias que estén muy contaminadas por el agua.
Consolar a tus hijos tras un ciclón
Empieza una conversación abierta
- Trata de ofrecer a tus hijos oportunidades para conversar sobre cómo se sintieron durante el ciclón, y anímalos a hablar de cualquier preocupación, miedo o angustia que puedan sentir.
- Muéstrales que los escuchas con atención y que te preocupa mucho cómo se sienten.
- Consuélalos físicamente con abrazos y cariño.
- Limita su exposición a las noticias de los medios que puedan causarles angustia.
Transmite tranquilidad
- Explícales que la tormenta y sus consecuencias son hechos puntuales y naturales, y que ellos no son los responsables.
- Ofrece afecto y seguridad a tus hijos pasando tiempo con ellos y abrazándolos aún más que de costumbre.
Detecta las señales de sufrimiento emocional
Muchas veces, los niños y niñas pueden parecer estar bien durante aproximadamente un mes después de un desastre. Sin embargo, esa aparente insensibilidad puede desaparecer y los niños pueden comenzar a mostrar síntomas de un trauma. Es normal que tu hijo se sienta angustiado, pero si este sentimiento no desaparece al cabo de unos meses o si tu hijo muestra síntomas más graves, como ataques de pánico o el deseo de hacerse daño a sí mismo o a los demás, habla inmediatamente con tu médico de cabecera o con un profesional de la salud mental.
Practica ejercicios de relajación con tus hijos
La respiración abdominal profunda es una técnica muy útil que puedes utilizar con tus hijos mayores. Con los más pequeños, puede convertirse en un juego: cada hora, pídeles que ralenticen la respiración para ver si son capaces de calmar su mente y su cuerpo.
Trata de mantener una rutina
Aunque pueda resultar increíblemente difícil, acostarse o comer a la misma hora cada día ayudará a tus hijos a tener una sensación de normalidad antes del ciclón.