Los Espacios de Apoyo a los Aprendizajes
UNICEF contribuye a la mejora del desempeño académico en las áreas de lectoescritura y matemáticas de niños y niñas entre 6 y 14 años residentes en los bateyes del sureste de la República Dominicana.

La baja calidad de los aprendizajes y el riesgo escolar
Uno de los graves problemas asociados al analfabetismo, además de la ausencia de oportunidades para acceder, permanecer y completar con éxito la escuela es la baja calidad de la enseñanza. Según el Ministerio de Educación (2011), a nivel nacional un 7.2% del alumnado reprueba el grado que cursa, con diferencias significativas entre el sector público (8.8%) y privado (2%).
Varios estudios internacionales (SERCE, 2010, SREDEC, 2009) han indicado el bajo rendimiento académico de los/as estudiantes dominicanos/as en el nivel básico, pero estos resultados se agravan entre la población más pobre y rural. Especialmente esta baja calidad de los aprendizajes unida a las precarias condiciones de vida es un factor clave que incrementa el riesgo de los/as estudiantes a repetir los grados y a abandonar la escuela, lo que se ha definido en el concepto de riesgo escolar.
La siguiente tabla sobre el porcentaje de estudiantes del nivel básico, (grados 1 a 6) en la provincia de San Pedro de Macorís en riesgo escolar desglosada por zona rural o urbana, indica que los niveles de repetición y abandono de los/as estudiantes son preocupantes dado que los/as estudiantes rurales tienen en promedio un porcentaje de riesgo escolar de un 19.3% mientras que los de zona urbana tienen un 9.5% cuando el promedio para Centroamérica es de un 12.2%. (CECC/SICA, 2010)
Los altos niveles de riesgo escolar de la población rural de San Pedro de Macorís, que incluye los bateyes, indica que esta población aunque está escolarizada tiene limitadas posibilidades de completar la educación básica y por lo tanto es un grupo en alerta preventiva que requiere que se focalicen y orienten refuerzos escolares a contra-turno de su horario escolar como la intervención propuesta de los Espacios de Apoyo al Aprendizaje.
Espacios de apoyo escolar para niños y niñas de 6 a 14 años
Los espacios de apoyo al aprendizaje se organizaran para grupos de niños y niñas entre las edades de 6 a 14 años, quienes recibieran apoyo para el aprendizaje de lectoescritura y matemática.
Estos niños pueden ser escolarizados o no, si no están escolarizados la facilitadora y la coordinadora lo identificarán y trabajarán con la familia y la escuela para su inclusión.
Se desarrollarán grupos de trabajo con la participación de 20 a 25 niños en cada uno.
Las estrategias de trabajo serán lúdicas y participativas, con la disponibilidad de materiales gastables y mobiliarios (sillas, mesas y pizarras) apropiados para el aprendizaje.
Las sesiones se desarrollarán en espacios comunitarios habilitados para tales fines, los cuales serán cedidos o aportados por la comunidad (Centro Comunitarios, Iglesias, Refugios, etc.).
En el proceso de trabajo con los niños y niñas se apoyará sus tareas escolares con libros, cuentos, canciones y recursos del medio para propiciar actividades educativas de interés a los niños y niñas.

El proyecto de seguridad humana en bateyes
Ante el panorama presentado este proyecto busca promover oportunidades de educación a niños/as y adolescentes a través de la alfabetización y mejora en la calidad de los aprendizajes en lectura, escritura y matemáticas, residentes en los bateyes en los que ASCALA hace una labor cotidiana.
Este proyecto se enmarca en el proyecto de Mejora de la Seguridad Humana organizado por PNUD, UNICEF Y ACNUR en alianza con un conjunto de socios implementadores, articulado con el MINERD. El mismo se inscribe en el componente programático “Servicios sociales inclusivos y de calidad en salud y educación”, resultado intermedio 2 vinculado a la promoción de la culminación de los estudios básicos y secundarios mediante el desarrollo de programas educativos inclusivos y de calidad para los alumnos/as con capacidades diferentes y la reducción de los factores de riesgo que dificultan su integración y permanencia.
Fortalecimiento de la red de alfabetización y apoyo escolar en bateyes
Para el proceso de alfabetización se realiza una selección alfabetizadores/as (que participan en la alfabetización de los adolescentes) y facilitadores (que participan en el apoyo escolar). El proceso de selección se realiza de la siguiente manera: convocatoria en los bateyes para entrevistas (difusión de la convocatoria a personas interesadas en alfabetizar por radio DIAL AM670, afiches en los centros comunitarios y en ASCALA), realización de entrevistas a los postulantes en ASCALA, selección de personal (10 personas).
La selección de los/as facilitadores de apoyo al aprendizaje se realiza convocando a docentes y profesores/as de la región, donde se cuenta con el apoyo de una persona externa y con amplia formación en educación para la selección final. También se cuenta con el apoyo de los voluntarios del Cuerpo de Paz para reforzar las áreas de idioma y computación, entre otras.
En el proceso de capacitación de los alfabetizadores realiza una capacitación de alfabetizadores/as y facilitadores/as que incluye:
- 1 taller inicial de formación en alfabetización.
- 2 talleres semestrales para reforzar la capacitación y profundizar en herramientas de alfabetización. Cada taller consta de una parte teórica y otra práctica en la que cada alfabetizador realiza la planificación semestral y construye junto al coordinador su ficha de informe mensual. La capacitación de los /as facilitadores de los espacios de apoyo escolar incluyen clínicas, seminarios, y/o talleres sobre las áreas específicas.
- Esta formación conlleva además: 1 taller inicial de introducción y 2 talleres semestrales para reforzar el aprendizaje. Se realizan, además, 3 talleres de producción multimedia con el grupo de facilitadores con igual dinámica: teoría de realización audiovisual y producción de spot radiales o televisivos de sensibilización. Estos talleres se realizan semestralmente coincidiendo con eventos de intercambio con otras experiencias de alfabetización y apoyo escolar de otras regiones del país.
- Acompañamiento técnico a alfabetizadores y facilitadores: Mensualmente los grupos son visitados por el/la coordinador/a del proyecto y cada facilitador/a hace entrega de su ficha de informe y revisa junto/a el cumplimiento de la planificación. Al finalizar cada semestre, se evalúa el desempeño de los/las facilitadores/as para asegurar el cumplimiento de las metas del proyecto.
- Semestralmente el coordinador realiza un informe general y revisa la planificación para realizar los ajustes necesarios.
- Organización de los grupos de alfabetización y apoyo escolar: El trabajo de alfabetización se realiza en 10 bateyes, con 1 alfabetizador/a por batey, a cargo de 1 grupo de 20-25 adolescentes en cada batey por semestre.
- El apoyo al aprendizaje se realiza en 10 bateyes. Éste será facilitado por 1 o 2 docentes de las áreas de matemática y lenguas según el grupo. Se forman grupos por nivel obtenido en la evaluación inicial.
- Contamos con miembros del Cuerpo de Paz para dar apoyo a niñas, niños y adolescentes en otras áreas del conocimiento.

Espacios de alfabetización de adolescentes
Se identifican a los/as adolescentes analfabetos/as: cada alfabetizador/a realiza un sondeo y registro de adolescentes analfabetos/as dentro del batey, desglosando sexo, edad y discapacidad.
Esta información es incorporada en una base de datos para poder realizar el seguimiento de los/as alumnos/as una vez alfabetizados/as. Semestralmente se actualiza esta lista dada la gran movilidad humana de los bateyes.
Se desarrollan grupos de trabajo con la participación de 20 a 25 adolescentes en cada batey por cada semestre.
La estrategia de trabajo es dinámica e interactiva, partiendo de los saberes de los niños y niñas, sus intereses y la realidad donde viven. Las sesiones se desarrollan dos días a la semana, dos horas por sesiones. Las decisiones sobre los días y horarios se toman de forma participativa junto con los adolescentes para garantizar la asistencia y permanentica de los grupos. Las sesiones se desarrollaran en espacios comunitarios habilitados para tales fines.