Presupuesto público para niñas, niños y adolescentes en Bolivia
Documento metodológico para la clasificación de recursos asignados a la infancia, niñez y adolescencia

Puntos destacados
La finalidad del estudio “Presupuesto Público para Niñas, Niños y Adolescentes en Bolivia” fue explorar el espectro fiscal del Presupuesto General del Estado, para identificar aquellos gastos insertos en planes, programas y proyectos que benefician a la niñez y adolescencia en nuestro país.
La metodología plantea que no se debe limitar el gasto a lo que específicamente se gasta en niñez y adolescencia, sino que se debe tomar en cuenta el gasto indirecto, aquel que beneficia a menores de 18 años a partir de programas orientados a familias u otros agentes que tienen una alta repercusión sobre la niñez.
Asimismo, se debe tomar en cuenta el gasto ampliado que es aquella proporción del gasto que beneficia a la niñez y adolescencia a través de programas que benefician a un grupo poblacional más amplio.
La evolución del gasto para la niñez y adolescencia en Bolivia ha tenido un ascenso importante. En 2005 se destinaba para este efecto la suma de Bs2.734 millones, mientras que en el presupuesto aprobado para la gestión 2015 dicha suma se eleva a Bs17.770 millones. Esto implica considerar que el crecimiento fue de 549%. Un dato importante para tomar en cuenta es la evolución del gasto dirigido a la niñez y adolescencia como porcentaje del producto interno bruto (PIB). Dicho porcentaje llegaba a 3,5% en 2005 y en 2015 llega a 7,8%.
Al comparar el total del gasto para la niñez y adolescencia como porcentaje del presupuesto del Gobierno General, muestra que para 2005 se asignaba el 7,1% del Presupuesto General de la Nación (PGN) a la niñez, en cambio para 2015 dicho indicador sube a 13,6%.
El Estado destinó a niños, niñas y adolescentes en 2015 Bs10.920 millones en educación, Bs3.185 millones en salud, Bs1.569 millones para mejorar las condiciones de vida de los niños, Bs681 millones en transferencias condicionadas (Bono Juancito Pinto y Juana Azurduy), Bs739 millones a deportes, Bs498 millones para el desayuno escolar y Bs177 millones para la protección de la niñez y adolescencia.
Aspectos que muestran la prioridad que da el Estado boliviano al desarrollo de las niñas, niños y adolescentes. En virtud de que se considera que el presupuesto para dicho sector más que un gasto debe verse como una inversión para el desarrollo del país.
