Activar por sus derechos
Jóvenes de Argentina por el cambio climático

El cambio climático se está produciendo muy rápido. La naturaleza no tiene tiempo para adaptarse. Y mientras la naturaleza de muestras de las consecuencias negativas, más son las voces que se levantan para impedirlo. Es el compromiso de los y las jóvenes alrededor del mundo.
En Argentina, miles de chicos y chicas militan en organizaciones, promueven hábitos más ecológicos o utilizan las redes sociales para contribuir a acelerar acciones que disminuyan los efectos negativos del cambio climático. Porque acá, y en el mundo, el cambio climático está entre los temas que les preocupan y los ocupan.
“Desde que me enteré de que estamos en una crisis climática y ecológica, movido por el miedo y la incertidumbre, me vi impulsado a actuar”. Así fue como Ezequiel Martinengo (19) se integró al movimiento internacional Fridays for Future en Argentina, donde cada viernes participa en movilizaciones que buscan acciones inmediatas del gobierno y de la sociedad, para que se involucren como parte de la solución a los desastres climáticos y ecológicos.
“Estamos a pocos años de sufrir unas consecuencias que inevitablemente traerán un colapso civilizatorio, y si hoy somos indiferentes no habrá un mañana en el que vivir”, dice Ezequiel.
Hay quienes, impulsados por lo que aprenden en la escuela o descubren en las redes sociales, instalan hábitos dentro de su propia casa, que la familia adopta. Así es el ejemplo de Agustina Toledo (16), promotora de la cultura del eco-ladrillo. “Es una botella que llenamos con todos los plásticos que usamos (de leche, del paquete de galletitas o del queso rallado) ¡Lo importante es lavarlo primero y ponerlo a secar, después lo ponemos en una botella de gaseosa o agua y listo!"
Lo que más entusiasma a Agustina es todo lo que se puede hacer con ese plástico: “¡Con el tiempo, teniendo una cantidad justa, podés hacer sillones, casas para perros y lo que te imagines!”


2030: Un plazo concreto para frenar un cambio irreversible
Según un informe de la ONU, las consecuencias negativas del cambio climático podrían ser irreversibles si no frenamos nuestras emisiones antes de 2030. Según los expertos, si nada cambia, en ese año comenzaría el principio del fin para nuestro planeta.
Los jóvenes están dando voces de alarma en todo el mundo, reclamando, movilizándose y utilizando todas las herramientas que tienen a su alcance para acelerar las acciones de cuidado climático que el mundo necesita.
Así, en marzo de este año, millones de jóvenes de todo el mundo, en más de 1.600 ciudades de más de 100 de países, participaron en las movilizaciones para exigir a los responsables políticos menos palabras vacías y más acciones para luchar de manera urgente contra el cambio climático.


Nicole Becker (18) participa en Jóvenes por el Clima Argentina, y lo hace porque “tenemos que resignificar al ecologismo, no sólo como acciones individuales sino como un cambio colectivo y entendiéndolo como un problema social”.
Junto a cientos de chicos y chicas de su organización lograron la declaración de la emergencia climática en Argentina y si bien considera que “la crisis climática no hace más que aumentar las desigualdades sociales ya preexistentes”, se siente esperanzada porque considera que hay todavía muchas mentes por abrir.
Aunque por momentos el entusiasmo los convierte más escépticos, no se detienen ante nada. Connie Isla (24) es actriz, cantautora y activista ambiental y animal. Tiene muchos seguidores en sus redes sociales, a quienes inspira con mensajes a través de su música, e informa acerca de veganismo, crisis climática, sustentabilidad y ayuda social.
Con plena consciencia de que un medio ambiente saludable es su derecho, Connie milita en Help Save Argentina, una organización con la que reparte comida vegana a gente en situación de calle de forma zero-waste, y tiene su propio emprendimiento de ropa artesanal y vegana slow fashion.
Sin embargo, para Connie, “el cambio real va a suceder cuando empecemos a ver consecuencias aún más trágicas e inmediatas”.
Tal vez por eso los y las jóvenes no se detienen. Participan sin descanso de todas las acciones que tienen a su alcance para presionar a los Estados a tomar medidas contundentes en materia de medio ambiente y cambio climático, y para que la sociedad tome conciencia respecto a lo que podemos hacer en nuestra vida cotidiana para revertir los presagios negativos sobre el futuro de nuestro medio ambiente.
“Me da esperanza sentir que los jóvenes somos la parte de la población más informada gracias a las redes sociales, y somos los que más accionamos ante estos problemas”, reflexiona Agustina, al tiempo que nos comparte un Instagram Storie explicando paso a paso cómo utilizar eco-ladrillos en casa.