A sus 43 años obtuvo su cédula por primera vez gracias a “Vamos”
Qué significa por fin tener una identidad, verse reflejada en un documento oficial y poder existir legalmente.

- Disponible en:
- Español
- English
Martina Chilavert tiene 43 años y por primera vez pudo tener una cédula de identidad gracias al Sistema de Protección Social “Vamos” del Gobierno Nacional, con apoyo de la Unión Europea, el Fondo de las Naciones Unidas para Infancia (UNICEF) y la Organización Internacional para el Trabajo (OIT).
Mamá de 7 hijos y abuela de 3, campesina y productora de cedrón, maní y maíz, Martina nos recibió en su casa ubicada en el asentamiento La Preferida de Santa Rosa del Aguaray, departamento de San Pedro, a 260 km de la capital de Paraguay. En el idioma guaraní profundo, con sus silencios y miradas de por medio, nos fue relatando lo que significó para ella tener por fin una identidad, verse reflejada en un documento oficial y poder existir legalmente.
“Es muy bueno tener una cédula porque es demasiado difícil vivir sin documentos”, expresó Martina explicando que de niña no pudo acceder al documento de identidad porque se había extraviado su certificado de nacimiento y su mamá no sabía cómo volver a conseguirlo. Fallecieron sus abuelos, luego sus padres y ella tampoco encontró la manera de recuperar sus papeles. Así pasó el tiempo, sin saber a quién recurrir para resolver su falta de identidad ni tampoco comprender qué tan relevante es este derecho humano.
Entrando en moto por un extenso camino de tierra, Modesta Arévalos, consultora de UNICEF para apoyar a la Unidad Técnica del Gabinete Social, va decidida hasta la casa de Martina. A los dos costados se ven campos silenciosos y casas alejadas unas de otras. Su trabajo consiste en ser enlace entre el Programa de Protección Social liderado por el Gobierno con apoyo de la cooperación internacional, y ser un soporte para los participantes de la iniciativa, quienes, como Martina, viven en situación de vulnerabilidad.
“A través de ña Modesta, que gestionó, pude conseguir. Me da mucho alivio y estoy muy contenta porque ahora ya tengo mi documento”, aseguró Martina mostrando orgullosa su cédula de identidad, pero antes lamentó que sus hijos e hijas tuvieron que ser inscriptos al Registro Civil únicamente con los apellidos del papá.
Lograr la garantía de derechos sin distinción
Modesta agregó que formar parte de este proceso representa un gran desafío, pero al mismo tiempo se ven logros de los cuales puede sentirse orgullosa.
“Como mujer y madre paraguaya, formar parte de este proceso representa un orgullo ya que con este programa se busca lograr la garantía de derechos en el ciclo de vida, es decir, desde el embarazo hasta los adultos mayores y en cada uno de los territorios que han sido seleccionados”, indicó. Para la primera fase de implementación, este programa se enfoca en las localidades de Villeta (Central), San Juan Nepomuceno (Caazapá), Santa Rosa del Aguaray (San Pedro) y Mariscal Estigarribia (Boquerón).
Mesas de protección social
El Sistema de Protección Social “Vamos” reúne toda la oferta de servicios sociales y de protección que ofrece el Estado para su implementación a través de un sistema único. La política pública involucra a 25 instituciones que conforman el Gabinete Social de la Presidencia de la República, y en su primera etapa se aprobó un paquete de 46 acciones estratégicas priorizadas.
En este proceso se han instalado las mesas de protección social, integradas por las instituciones que son parte de los programas nacionales que están alineados al Sistema de Protección Social, y desde aquí se van identificando los aspectos que serán profundizados.
Jóvenes unidos por una misión
Además de promover mesas de protección social donde instituciones como la Policía Nacional, el Departamento de Identificaciones, los ministerios de Salud y Educación, entre otros, se reúnen regularmente para establecer prioridades y acciones coordinadas en los municipios, el proyecto promueve el involucramiento de la comunidad con el objetivo de que toda la sociedad comprenda la importancia de contribuir desde distintos sectores, dentro y fuera del gobierno, a la protección social.
En esta línea, Modesta Arévalos apoya a un grupo juvenil de Santa Rosa del Aguaray quienes vienen participando de espacios de diálogo y talleres de formación para poder colaborar con una mejor ciudad.
Ida Heredia es una de las participantes del grupo “Unidos por una misión” y explicó que, pese a la apatía, la pandemia de COVID -19 y la falta de oportunidades, existen muchos jóvenes con deseos de contribuir de manera positiva a su ciudad. Sobre el caso de Martina, expresó: “La cédula de identidad es importante porque es algo que yo soy, que estoy en este país, que puedo reclamar mis derechos”.
El caso de Martina es un claro ejemplo de que el sistema debe proteger y buscar caso por caso las fallas y tratar de resolver y garantizar los derechos de todas las personas, sin distinción, según la visión de este programa, que, a través de actores claves, tratan de generar planes para acortar las brechas existentes en el país.
Desde el proyecto de “Protección social y mejora de las finanzas públicas” UNICEF brinda asistencia técnica para la instalación de la política pública de Protección Social en Paraguay, para que las niñas, niños y sus familias tengan oportunidad de hacer frente a la vulnerabilidad económica y social a lo largo de toda su vida.
“Es muy bueno tener una cédula porque es demasiado difícil vivir sin documentos”