Niños y niñas en Gaza siguen en peligro
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Mariel, Celeste y Elías

Cómo se han recuperado después del huracán Otis

Angélica Vergara
Mariel y Celeste
UNICEF México / Angélica Vergara
10 Febrero 2024

El fuerte golpe del huracán Otis afectó de diversas formas a niñas, niños y adolescentes principalmente en Acapulco.

Además del miedo que sintieron esa noche del 25 de octubre, sus derechos como a tomar agua segura, a ir a la escuela y aprender, a recibir atención médica y ser protegidos contra todo tipo de violencia, pudieron verse afectados. Por ejemplo, Mariel de 5 años y si hermanita Celeste de 3, sintieron mucho miedo al escuchar el viento tan fuerte y ver cómo el agua se metía en su casa. Su mamá nos contó que tuvieron que brincarse a la casa de su vecina para poder salir. Como resultado de la cantidad de polvo que había en la ciudad y haber permanecido mojadas por mucho tiempo, Mariel y Celeste de enfermaron de las vías respiratorias.

Dado que muchas clínicas y hospitales también fueron seriamente afectados por el huracán, la atención médica no era suficiente durante los primeros días de la emergencia. En coordinación con las autoridades de salud locales y federales, desde UNICEF llevamos una unidad médica móvil para poder apoyar la respuesta. Mariel y Celeste así pudieron recibir orientación médica, nutricional y psicológica para ayudarles en su recuperación.

Elias-Acapulco
UNICEF México / Angélica Vergara

Ya que la salud mental es tan importante como la física, trabajando mano a mano con las autoridades y nuestros socios, en UNICEF creamos Espacios Amigables para la Infancia donde niñas y niños, mediante juegos, actividades deportivas y artísticas pueden procesar sus emociones. Estas actividades les ayudan a fomentar su resiliencia y contribuyen a su bienestar psicosocial.

Este fue el caso de Elías, de 12 años. Además del temor que experimentó en el momento después tuvo que ayudar a limpiar su casa que fue seriamente afectada por el huracán, para él, haber encontrado estos espacios fue un respiro porque pudo jugar, divertirse y sobre todo, convivir con otros niños y niñas.

Hoy, muchos niños, niñas y adolescentes como Celeste, Elías y Mariel, han iniciado su recuperación física y emocional, ahora tienen más salud y confianza para retomar sus actividades diarias, regresar a la escuela y seguir siendo niños.