“Gracias a las vacunas estamos ahora retornando a la normalidad”

A un año y cuatro meses del inicio de la vacunación contra el COVID19 en Chile tenemos algunas certezas. El virus sigue presente, pero hemos podido retornar a la normalidad. Los niños y niñas han regresado a clases presenciales, los casos han disminuido, y hemos podido volver a tener reuniones familiares. Y esto es gracias a las vacunas, las que, como nos cuenta el pediatra Jaime Rodríguez “las vacunas han logrado salvar miles, millones de vidas en el planeta. Y ahora la pandemia está en una etapa de control”.

Sobre el proceso de vacunación, cantidad de dosis que debemos colocarnos, respuesta de la inoculación en el manejo de la pandemia conversamos con el presidente del CAVEI, Consejo Asesor de Vacunas e Inmunización, el pediatra infectólogo, Jaime Rodríguez.

¿Por qué es importante seguir vacunándose contra el Covid si ya nos hemos vacunado, no sé, cuatro veces en un año?

Uno entiende que en la población hay cierto agotamiento con tanta pandemia, tantas vacunas, qué se yo. Las vacunas, cuando empezaron a administrarse para el Covid-19, lograron salvar miles, millones de vidas en el planeta. Y ahora la pandemia está en una etapa de control en la que el virus Covid-19 está en una situación permanente, pero no con estos brotes epidémicos intensos que nos mantuvieron encerrados y con mucho miedo durante los años anteriores.

Es sumamente importante mantener el estado de vacunación porque el virus sigue circulando, todavía hay gente susceptible y además con factores de riesgo, por ejemplo, pacientes añosos que tienen comorbilidades, niños con inmunodeficiencias, que tienen cáncer, o que están trasplantados, o tienen alguna otra enfermedad que hace que su cuadro de Covid-19 pueda ser más grave. Tuvimos una reunión con el Comité de expertos y una de las cosas más importantes que tratamos fue que la adherencia a las vacunas de las familias, ojalá sea lo mayor posible para que siga la pandemia bajo control.

Está súper estudiado que cuando tú bajas las coberturas de vacunas, o sea, bajas un poco la guardia, rápidamente los virus empiezan a avanzar y aparecen las enfermedades de nuevo. Así que ojalá la gente siga adhiriendo a las vacunas y vaya colocándose esta “dosis de refuerzo” para que se mantengan protegidos.

Ahora estamos en la cuarta dosis, ¿deberíamos pensar que hay una nueva dosis de refuerzo eventualmente el próximo año, a fines de este año según avance el virus?

Sin duda. Vamos a tener que ir colocando dosis de refuerzo, pero esas dosis van a estar orientadas probablemente a las poblaciones de riesgo y tal vez el Covid-19 va a parecerse mucho a la vacuna de la Influenza, que la vacuna de Influenza que está administrándose a poblaciones de riesgo, o sea, a niños pequeños, adultos mayores, gente con comorbilidades, etc., y probablemente vamos a tender a ir protegiendo a estos grupos de riesgo en primer lugar y después a la población general.

Pensando en la población en general, ¿qué le dirías a esa gente que cree que ya se vacunó una vez y que ya no necesita la dosis de refuerzo? ¿Cómo les podemos hablar a esas personas que son más escépticas?

Súper bueno el punto, porque es el tema en discusión en la actualidad. Yo, en general, a mis pacientes les digo que ojalá no nos veamos en el hospital. Básicamente, cuando uno sabe que  hay una estrategia de prevención que es sólida y que tiene evidencia científica, como son las vacunas, hay que tratar de ocuparla. 

A veces hay un exceso de confianza o se pierde la percepción de riesgo, pero la gente está ajena a la realidad que tenemos en los hospitales donde todavía hay pacientes graves. Entonces, el tema está en insistir en que adhieran al proceso de vacunación.

¿En qué está ayudando la vacunación este año en la lucha contra el Covid-19?

Bueno, a diferencia de lo que pasaba en los años anteriores, que estábamos en confinamiento y había mucha letalidad asociada, de a poco hemos ido retomando nuestra vida normal, de hecho, recuerdo que teníamos una especie de campaña para que los niños pudieran volver al colegio y ahora ellos están en forma normal asistiendo al colegio, obviamente con el uso de mascarillas todavía, pero ya no tenemos esa percepción de riesgo de que vamos a salir a la calle y nos vamos a morir.

Estamos en una etapa de transición en que las vacunas, generalmente, son víctimas de su éxito, entonces, como son exitosas, se pierde esta sensación de riesgo de que te vas a morir o que te vas a enfermar grave y la gente empieza a dejar de adherir y a dejar de vacunarse.

Pero gracias a las vacunas estamos ahora retornando a la normalidad. Y Chile ha sido un ejemplo a nivel mundial. Chile es uno de los países, si es que no es el primero, uno de los principales países en que tuvo un proceso de vacunación rápido, se vacunó la mayoría de la gente, y la verdad es que cuando tú te comparas con el resto de los países de Latinoamérica, nosotros estamos en una posición de privilegio. Chile ha sido un ejemplo y deberíamos seguir siéndolo.

Nosotros el año pasado hicimos una campaña, justo en esta época, que se llamaba “Vacúnate por los niños”, los niños no se podían vacunar hace un año, y ahora ya se pueden vacunar. ¿Cómo se ha comportado la vacunación a menores de edad?

El ideal es que los niños se vacunen y se sigan vacunando. Si bien es cierto que la infección en ellos no es tan severa como en adultos, sí tenemos algunos fallecidos y tenemos niños que tienen factores de riesgo, con niños que se han muerto o que han tenido enfermedades gravísimas por Covid 19, en especial con inmunodeficiencias, por ejemplo, niños con síndrome de Down, enfermedades al corazón o niños obesos. La obesidad es bien común en nuestro país, incentivada por la pandemia, por la falta de actividad física y la ansiedad que te hace comer más.

El llamado a los papás es que confíen en las vacunas. Habemos varios expertos que trabajamos bastante en silencio revisando qué pasa con los niños y niñas, cómo es su respuesta inmune, qué efectos secundarios tiene. Hay mucha gente trabajando detrás de eso, así es que el llamado es a que se vacunen, que tengan confianza en el sistema. Los niños y niñas sanos, para nosotros, son un logro y, si podemos prevenir a través de una vacuna, mejor aún.

¿Podemos darle la confianza a los papás que respaldan que la vacuna de 3 a 17 años es segura para ellos?

Es segura, es mucho más segura que la infección natural. Se han puesto miles de millones de dosis en el planeta. Entonces, tenemos experiencia en relación con los efectos secundarios que, afortunadamente, son súper raros, existen, pero la verdad es que son tan raros que es mucho mejor vacunarse antes de padecer la infección natural.

Cómo se explica que algunos se enfermen y otros no, a pesar de que convivimos con el virus, ¿es por las vacunas?

Hay dos opciones: Una, que se tenga esta súper inmunidad. Hay que gente que tiene, para el coronavirus, un sistema inmune privilegiado y que no se enferman, y se está estudiando a esa gente de por qué no se enferman de coranavirus que es un grupo no muy grande.

Y otra opción son las vacunas, dentro de las cosas que hacen, dependiendo del tipo de vacuna que te hayas puesto, por ejemplo, es prevenir la infección con síntomas. O sea, si estás vacunado ni siquiera te enfermas y eso disminuye la transmisión. Y puede ser que lo que esté pasando en el planeta es que, como gran parte de la población del planeta ya está vacunada, la transmisión del virus se ha visto disminuida.

Entonces, las vacunas están haciendo la pega y eso hace que otro grupo, que sí se enferma lo haga en forma no tan severa. Y hay un grupo pequeño que se puede enfermar en forma severa, que son los menos, y en la actualidad los que más se están enfermando graves son los que no están vacunados.

¿La gente que está en los hospitales es gente que no se ha vacunado o no ha completado su esquema de vacunación?

Exactamente. Es súper importante completar el esquema

¿Cuál es tu llamado?

Yo soy pediatra hace 30 años e infectólogo infantil hace 27 y vi morir a muchos niños por enfermedades que ahora son prevenibles gracias a las vacunas. Vivir la muerte de un paciente y sobre todo de un niño, es un proceso extremadamente doloroso y, así como a los padres, a uno lo marca para toda la vida. Las vacunas salvan vidas y eso cuesta transmitírselo a la gente. Hoy vivimos en una situación de privilegio ya que nuestros niños, afortunadamente no se enferman de las enfermedades terribles que había antes. Se enferman de resfríos, pero no tenemos los hospitales llenos de meningitis, de encefalitis, de cosas gravísimas.

Hago un llamado a las familias a que vacunen a sus hijos, que recuerden que salvan vidas. El sueño de uno es tener un niño sano, que no se enferme y que sea un adulto saludable y que contribuya a la sociedad. Somos muchos los que trabajamos para eso y ayudamos a los padres y a las familias a que eso sea real. Las vacunas son una herramienta de equidad en salud. La misma vacuna que se coloca a un millonario, se le coloca a una persona pobre en África, y es exactamente la misma vacuna con los mismos estudios. Nuestro sueño de que haya equidad y todo los hacen las vacunas. En Chile las vacunas más importantes están en el plan nacional de inmunización que, además, es de acceso libre, gratuito en todo el país. Estamos mal acostumbrados a que funcione tan bien.