APOYO MUNDIAL A LA ACCIÓN HUMANITARIA
UNICEF se propone brindar a las actividades humanitarias un apoyo operacional y programático eficaz, previsible y oportuno. Esa función básica está diseñada de manera que garantice la capacidad de apoyo con carácter estratégico, sistemático y adecuado a las necesidades, independientemente de la magnitud o causas de las situaciones de emergencia, o de cualquier otra situación que supere las posibilidades de respuesta de los países y ponga en peligro el bienestar y los derechos de los niños y mujeres.
La acción humanitaria de la organización abarca la reducción de riesgos —incluso las actividades de alerta temprana y preparación en el marco de las actividades del desarrollo— y la respuesta rápida y la recuperación durante las crisis humanitarias. UNICEF, que se concentra en los resultados a largo plazo para los niños y niñas, entiende que la ayuda humanitaria hace posible que en los países aumente el respeto por la Convención sobre los Derechos del Niños y se produzca un avance más veloz hacia la conquista de los Objetivos de Desarrollo del Milenio y de otros objetivos del desarrollo de carácter internacional.
En los últimos años, UNICEF y sus aliados han realizado importantes inversiones en materia de mitigación de las situaciones de emergencia, actividades de preparación, mecanismos de alerta temprana y sistemas de respuesta y recuperación. También se han dado pasos hacia la integración plena de las responsabilidades y la obligación de rendir cuentas con respecto al desempeño de los grupos sectoriales en las funciones básicas de UNICEF a nivel de los países, las regiones y la Sede. La naturaleza dinámica y cambiante del contexto humanitario implica que esas capacidades y sistemas demandarán constante apoyo y adaptación a fin de garantizar una preparación adecuada ante futuras crisis, así como métodos eficaces de previsión de tendencias que hagan posible la toma inmediata de medidas adecuadas y la recuperación temprana.
Las inversiones destinadas a fomentar el carácter sostenible y el aumento de la capacidad, el mantenimiento de la flexibilidad, el fortalecimiento de las alianzas estratégicas y el apoyo a la excelencia técnica resultan fundamentales para garantizar que UNICEF y sus aliados puedan satisfacer las necesidades de los niños, niñas y mujeres afectados por las situaciones de emergencia, dondequiera y cuando quiera se produzcan, además de abogar por los derechos de esos sectores de la población.
Las prioridades principales que se enumeran a continuación constituyen el fundamento de la visión y las estrategias básicas del Plan estratégico de mediano plazo de UNICEF y de los Compromisos básicos para la infancia en situaciones de emergencia. UNICEF se involucrará en las siguientes esferas estratégicas intersectoriales para apoyar la convergencia de estrategias, capacidades y acciones destinadas a proteger las vidas de los niños y las niñas: la promoción y elaboración de políticas, la planificación estratégica de los países, la gestión de los conocimientos y la dirección y coordinación de los grupos sectoriales.
Promoción y elaboración de políticas
UNICEF continuará trabajando activamente para fortalecer las normas y políticas mundiales referidas a los niños y niñas afectados por las crisis humanitarias y otras situaciones de emergencia. A tal fin, el organismo colaborará con los procesos interinstitucionales de elaboración de políticas y promoción en el marco del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y otros foros intergubernamentales con el objetivo de fortalecer el derecho y las políticas internacionales que se relacionan con los niños en los conflictos armados, la violencia sexual en los conflictos armados, las mujeres, la paz y la seguridad y la protección de la población civil.
Programación estratégica de los países
Debido a que los desastres y conflictos armados son cuestiones que se relacionan tanto con la acción humanitaria como con el desarrollo, UNICEF ha adoptado un enfoque estratégico con respecto a la reducción de los riesgos a fin de prevenir, mitigar y llevar a cabo actividades de preparación ante las situaciones de desastre en todos los sectores y en todas las fases de la acción humanitaria. El organismo internacional continuará fortaleciendo sus políticas y procesos de programación a fin de garantizar que las oficinas de los países reciban la orientación y el apoyo que requieren para poner en práctica enfoques de reducción del riesgo como parte de sus programas de países.
UNICEF continuará aumentando el nivel de sus actividades en materia de alerta temprana y preparación y planificación para las situaciones de emergencia, así como fortaleciendo la capacidad a nivel nacional. Se brindará apoyo técnico por medio de especialistas en programas y operaciones a los países que atraviesen crisis humanitarias o que estén en peligro de sufrirlas. La organización colaborará con las oficinas regionales a fin de aumentar el grado de capacidad y aplicar enfoques integrados orientados a la mitigación, reducción y reparación ante las situaciones de emergencia. Esa política resulta particularmente adecuada en el plano subregional, donde los desastres naturales y los conflictos armados suelen superar las fronteras nacionales y exigen políticas integradas transfronterizas de prestación de ayuda, mitigación de los efectos, reducción de los riesgos y preparación.
Para confrontar los desafíos crecientes que presentan los desastres y los conflictos armados, así como para reducir el grado de peligro que corren los niños y niñas y garantizar respuestas más confiables y procesos de recuperación sostenibles resulta fundamental aprovechar la capacidad combinada de las partes interesadas en cada país. UNICEF también seguirá profundizando su colaboración con las oficinas de los países para que las autoridades de gobierno – tanto nacionales como subregionales – y las organizaciones no gubernamentales y de la sociedad civil adquieran mayor capacidad.
En ese contexto, se brindará particular apoyo a las oficinas de países que se encuentren en situación de poscrisis y a los países que atraviesen situaciones de emergencia prolongadas y complejas, como las que requieran la realización simultánea de operaciones humanitarias y de recuperación. En tales circunstancias, las intervenciones humanitarias y de desarrollo deben adecuarse a la situación y tener en cuenta las características políticas y de seguridad del ámbito en que se desarrollan.
Gestión de los conocimientos
La vigilancia y el análisis sistemático de la situación de los niños, niñas y mujeres tienen una importancia fundamental con respecto a la eficacia de la acción humanitaria y la recuperación después de las crisis. UNICEF continuará invirtiendo en los procesos, sistemas y herramientas que permitan obtener información oportuna y pertinente acerca de la situación de los niños, niñas y mujeres, así como sobre los resultados de sus labores humanitarias.
Uno de los factores más importantes con respecto al aumento de la capacidad de respuesta humanitaria es el aprovechamiento de las lecciones obtenidas en las situaciones de crisis anteriores. UNICEF seguirá colaborando con el desarrollo de una sólida base de pruebas que se empleará en las labores de programación, y tratará de fortalecer las herramientas y la capacidad de los países en materia de análisis de la vulnerabilidad y capacidad, especialmente en lo que concierna a los niños, niñas y mujeres.
La organización respaldará la elaboración de estrategias más amplias de reducción de los riesgos y de respuesta humanitaria que guarden conformidad con sus Compromisos básicos para la infancia en situaciones de emergencia. También implementará un sistema de vigilancia del desempeño, que servirá para aumentar y mejorar la capacidad y los sistemas nacionales de supervisión a nivel sectorial y de grupo sectorial, conforme a los mecanismos interinstitucionales de rendición de cuentas.
Sistemas de respuesta mejorados
Por medio de las iniciativas y el apoyo originados en su Sede, UNICEF ha mejorado en años recientes los sistemas internos de respuesta a fin de que funcionen de manera oportuna y confiable. Entre las medidas tomadas figuraron:
- El aumento de la capacidad de despliegue inicial de personal por medio de asignaciones internas, empleo de personal de reserva y disposiciones para hacer frente a las contingencias.
- La modernización de las instalaciones de depósito y almacenamiento en Copenhague y la descentralización de la red de sitios de acopio preventivo de suministros.
- La creación de mecanismos internos de respuesta rápida que posibilitan la financiación inmediata de las labores orientadas a salvar vidas en las 48 horas inmediatamente posteriores al inicio de las situaciones de crisis y a cubrir los déficits de fondos hasta que sea posible hacer uso de los recursos de los donantes.
- La simplificación de los acuerdos de alianza con las organizaciones no gubernamentales, como la revisión del marco del Acuerdo de cooperación con los asociados.
Los importantes avances logrados en cada uno de estos aspectos críticos se refinarán aún más mediante el empleo sistemático de los nuevos sistemas y políticas operacionales, así como mediante el aumento de la capacidad a nivel regional y del país.
Liderazgo sectorial y coordinación
UNICEF mantiene su compromiso de fortalecer su capacidad de liderazgo sectorial y las funciones que desempeña como organismo aliado de conformidad con lo estipulado por el Comité Permanente entre Organismos. En el plano mundial, UNICEF es el organismo a cargo de los grupos sectoriales de nutrición, agua, saneamiento e higiene, y educación (grupo cuya dirección comparte con Save the Children). En el marco más amplio del grupo sectorial de protección, UNICEF es el organismo coordinador de los grupos de trabajo sobre la protección de la infancia y sobre la violencia basada en género, que comparte con el Fondo de Población de las Naciones Unidas. UNICEF forma parte integral de los grupos sectoriales de salud, logística y recuperación temprana, y comparte la presidencia de los grupos de referencia de salud mental y apoyo psicosocial. La organización continuará colaborando con sus aliados en esos grupos a fin de aumentar la capacidad de respuesta tanto a nivel mundial como de países, de instituir normas y políticas, de crear herramientas y de brindar apoyo operacional. UNICEF entiende que el enfoque sectorial ofrece un importante punto de entrada para la creación de capacidad y el desarrollo de sistemas de los aliados sectoriales en el plano nacional, así como para la mayor integración de la reducción de riesgos en las actividades de preparación, respuesta y recuperación con posterioridad a las crisis.
Fondos requeridos
Para poder llevar a cabo las acciones mencionadas y brindar el grado de apoyo mundial necesario a las iniciativas que se mencionan en los capítulos nacionales y regionales del Informe de Acción Humanitaria 2010, UNICEF requiere 49 millones de dólares EE.UU. en 2010. Mediante esos fondos, UNICEF podrá mantener la capacidad institucional necesaria para garantizar las intervenciones de calidad consistente, la implementación de enfoques organizativos estratégicos, la colaboración con los gobiernos nacionales en la generación de consensos y compromisos, la prestación de apoyo técnico, el fortalecimiento de la acción humanitaria predecible mediante el enfoque sectorial y la creación de capacidad a nivel nacional en colaboración con los aliados y los gobiernos en todos los sectores. En el Gráfico 2.1 que aparece a continuación se detallan los totales de fondos requeridos para 2010 por las esferas prioritarias de Prioridad Estratégica de Mediano Plazo, que reflejan la base de la respuesta e implementación de las mencionadas prioridades mundiales intersectoriales en materia de apoyo de UNICEF. Del total de 49 millones de dólares EE.UU. requeridos, un 40% podría ser financiado mediante fuentes de ingresos existentes, lo que dejaría una diferencia de 29 millones de dólares por saldar.
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FIGURE 2,1: EMERGENCY FUNDING REQUIREMENTS FOR UNICEF GLOBAL AND OPERATIONAL SUPPORT IN 2010 | |
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Prioridad estratégica de mediano plazo — Esfera de prioridad |
En millones de dólares EE,UU, |
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Supervivencia y desarrollo de los niños de corta edad |
17,6 |
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Educación básica y paridad de género |
10,6 |
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El VIH/SIDA y los niños |
1,3 |
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Protección de la infancia contra la violencia, la explotación y el abuso |
7,5 |
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Promoción política y alianzas en pro de los derechos de los niños |
8,3 |
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Subtotal |
45,3 |
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Costos indirectos de apoyo a los programas |
3,2 |
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Total |
48,5 |
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Financiado |
19,5 |
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No financiado |
29 |
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Fuente: Unidad de programa de asistencia humanitaria y de transición de UNICEF, fines de 2009. | |