“Antes hacíamos las entrevistas escritas, ahora somos más ágiles, lo que estresa menos a los chicos”
Niñez migrante y Primero
Ciudad de Guatemala. Unos padres procedentes del área rural esperan en la calle para poder ingresar a Casa Nuestras Raíces, un albergue gestionado por la Secretaría de Bienestar Social (SBS), ubicado en el Centro Histórico de la Ciudad de Guatemala para atender la niñez y adolescencia en contexto migratorio que ha sido retornada por vía aérea. Los padres fueron citados para recoger a sus hijos o hijas, luego de que éstos intentaran llegar hacia Estados Unidos sin el acompañamiento de un adulto.
Al subir las escaleras del edificio los padres son recibidos por personal de la SBS en una sala de espera. Después de documentar la salida de cada niño, los padres pueden abrazar nuevamente a sus hijos o hijas y prepararse para el largo camino de regreso a sus comunidades de origen.
El proceso se desarrolla de manera muy ordenada y el albergue, de pronto, queda casi vacío. La calma es solo momentánea porque hay información de un nuevo vuelo con niñas, niños y adolescentes retornados a Guatemala. El personal se prepara a recibirlos, reiniciando así el protocolo de registro de cada uno utilizando la plataforma informática Primero (Sistema de Gestión de la Información de Protección Infantil), una herramienta promovida por UNICEF gracias al financiamiento de los gobiernos de Suecia y Estados Unidos, el cual facilita el manejo de la información, la reunificación familiar y el seguimiento comunitario.
A través de esta plataforma, los trabajadores sociales pueden documentar cada caso, desde la identificación y registro de las niñas, niños y adolescentes, hasta la planificación, evaluación, seguimiento y un cierre exitoso.
“Cuando las niñas, niños o adolescentes ingresan al albergue se les atiendo satisfaciendo sus necesidades básicas de alimentación e higiene. Luego se les hace una entrevista en el área de psicología, pasan por el médico y por último son reunificados con sus familias”.
Guatemala es el primer país de Latinoamérica en implementar Primero, y desde su ejecución a principios del 2020 se ha registrado y dado seguimiento a más de 13.000 casos, brindando una atención integral a la niñez.
“Primero nos benefició a la hora de realizas las entrevistas. Antes hacíamos las entrevistas escritas, y nos llevaba mucho tiempo. Ahora somos más ágiles y breves, lo que estresa menos a los chicos en este proceso”, añade Jennifer. El sistema Primero también ha permitido reducir la cantidad de entrevistas que se les hacía a cada niño en cada etapa del proceso sobre los detalles del viaje, evitando así victimizarlo.
“Anteriormente, debido al papeleo, tardábamos meses para derivar los casos a los socios implementadores encargados de dar seguimiento a las niñas y niños que requieren de una la atención especial en sus comunidades”, afirma Sharon Huertas, a cargo de Casa Nuestras Raíces. “Ahora todo fluye más veloz, las delegaciones Departamentales de SBS tienen acceso al sistema y, en tiempo real, pueden verse detalles de cada caso y actuar. Es un sistema muy amigable, nos permite exportar la información de manera sencilla”, añade.
En los últimos años se ha registrado un notable incremento de la cantidad de niñas, niños y adolescentes en contexto migratorio retornados. Por ello, el sistema Primero les brinda a las instituciones gubernamentales la posibilidad de realizar su trabajo de forma más eficiente en beneficio de la niñez.
“Al usar Primero, las instituciones del Gobierno pueden tomar decisiones en base a la información que se ingresa en el sistema para garantizar que la niñez tenga acceso a servicios de atención psicosocial, atención médica, un adecuado alojamiento centrado en su bienestar”, dijo Estuardo Pineda, Oficial de Innovación y Tecnologías para el Desarrollo de UNICEF.
Unos jóvenes descansan en sus literas, otros dos hacen manualidades en una sala decorada por dibujos y pinturas hechas por quienes los precedieron. Todos ellos saben que sus padres, madres o cuidadores van en camino y que el día siguiente podrán estar con ellos nuevamente. Los operadores de la SBS, gracias al sistema Primero, inician un proceso de seguimiento y muy pronto sus colegas Departamentales o socios implementadores programarán una visita a sus hogares.
UNICEF apoya la implementación del sistema Primero a nivel global para ayudar a los gobiernos para que través de la innovación y la tecnología puedan responder ante cualquier crisis humanitaria, mejorando la calidad de la atención a grupos vulnerables y proteger a las niñas y niños en riesgo.