Semana Mundial de la Inmunización
Descubre cómo las vacunas pueden mantener a tu hijo y tu comunidad a salvo

Las familias de todo el mundo se están enfrentando al brote de la enfermedad por coronavirus (COVID-19). Repentinamente, las madres y los padres deben hacer frente a una tarea difícil y urgente: protegerse a sí mismos y a sus hijos de una enfermedad contagiosa que se propaga rápidamente. El virus de la COVID-19 es una revelación horrible de que los brotes pueden aparecer en cualquier país y que, en un mundo interconectado, que haya un brote en un lugar supone una amenaza para los niños de cualquier parte del mundo.
Desarrollar una vacuna segura y eficaz lleva tiempo, pero gracias a la inversión sin precedentes en investigación y desarrollo y a la cooperación mundial, los científicos han podido desarrollar una vacuna contra la COVID-19 en un tiempo récord, sin dejar de mantener una normativa sólida, basada en la evidencia y rigurosos estándares.
A pesar de esta prometedora noticia, el brote de la COVID-19 ha ralentizado la distribución de vacunas para otras enfermedades mortales y altamente contagiosas que pueden prevenirse con vacunas, como el sarampión y la poliomielitis. Los sistemas de salud de todo el mundo están sobrecargados y, cuanto más tiempo se prolongue la pandemia, más servicios sanitarios esenciales como la inmunización se verán interrumpidos.
Los brotes son inevitables cuando hay grupos de niños que están desprotegidos. En la actualidad hay 13 millones de niños que no reciben ninguna vacuna. En algunos casos, el conflicto dificulta la distribución de vacunas en zonas remotas o restringidas; en otros, son los padres los que deciden no vacunar a sus hijos porque no conocen los peligros que entrañan esas enfermedades o porque la desinformación les ha generado desconfianza.
La COVID-19 está trastocando la normalidad y, como consecuencia, muchas familias se estarán preguntando si aún pueden vacunar a sus hijos. Nuestra recomendación es que, si todavía tienes acceso a la inmunización, aproveches la oportunidad para vacunar a tus hijos atendiendo a las directrices nacionales y locales acerca de las medidas de protección para la COVID-19. De esta forma, cuando tus hijos regresen a la escuela estarán protegidos contra otras enfermedades. Si los servicios de inmunización no están disponibles, será importante vacunar a los niños tan pronto como sea posible hacerlo en condiciones de seguridad.
El brote de COVID-19 es una demostración de cuánto nos jugamos cuando las comunidades no disponen del escudo protector de la inmunización para protegerse de una enfermedad infecciosa. Las vacunas, cuando están disponibles, son el instrumento más efectivo para prevenir brotes de enfermedades peligrosas. Por eso, es más importante que nunca permanecer informado acerca de los beneficios de las vacunas, así como de los peligros que supone no vacunarse.
La ciencia es clara. Las vacunas son instrumentos seguros y efectivos que salvan vidas y previenen brotes.
#LasVacunasFuncionan