Prevención del Zika
UNICEF apoya a las autoridades nacionales y locales en la prevención de la transmisión del virus del Zika y su impacto en los niños, niñas y adolescentes con malformaciones congénitas.

El brote de Zika en 2015 planteó, en El Salvador, un escenario hasta entonces desconocido para la salud de la población, principalmente para las personas en edad reproductiva, mujeres embarazadas y bebés en gestación.
Ante esta coyuntura, UNICEF implementó acciones intersectoriales de respuesta a nivel nacional y local: primero, en materia de prevención del Zika, bajo el enfoque de cambio de comportamiento a través de comunicación para el desarrollo (C4D); y segundo, mediante una estrategia de cuidado infantil y apoyo a familias con niñas y niños con el Síndrome Congénito del Zika (SCZ) u otras anomalías congénitas.
A nivel central, priorizó en la actualización de conocimientos y herramientas pedagógicas para promoción de mensajes de prevención y de auto cuido con la metodología de “Entrenando a entrenadores” (ToT, por sus siglas en inglés), dirigido a personal de servicios de salud del primer nivel de atención y a proveedores de educación, a nivel público.
Asimismo, brindó equipo tecnológico para acelerar los cálculos estadísticos y profundizar en el análisis de la información recabada por el Sistema Nacional de Vigilancia Sanitaria del MINSAL. Aspectos que contribuyeron en el desarrollo del Atlas de Inequidades Sanitarias y el desarrollo de investigaciones epidemiológicas en el país.
De forma paralela, la organización apoyó a las direcciones de Comunicación y Promoción de Salud del MINSAL y de otros socios (como USAID) en la elaboración de la Estrategia de Comunicación y Participación Ciudadana para el Abordaje Integral del Zika y otras Arbovirosis, desde el enfoque C4D.
La promoción de mensajes claves sobre prevención se enfocó en el cuidado infantil, y apoyo familiar a través de redes sociales institucionales; realización de sondeos de conocimientos, actitudes y prácticas (CAP) entre adolescentes (por medio de la herramienta U-Report El Salvador) y estudios científicos CAP en localidades específicas.
Considerando las consecuencias de la enfermedad en recién nacidos, durante el segundo año de ejecución del programa, UNICEF trabaja en escalar el tema de anomalías congénitas, respuesta al Zika y otros espacios de coordinación intersectorial entre salud, educación y socios claves, que permitan el trabajo intersectorial para el desarrollo infantil temprano de la niñez.