Salvando vidas durante el parto en la Liberia rural

La tasa de mortalidad materna en Liberia es una de las más altas del mundo, con 1.072 muertes maternas por cada 100.000 nacimientos

Por Yulia Widiati
UNICEF Liberia/2016
12 Mayo 2016

En una comunidad rural, el personal respaldado por UNICEF, capacitado para atender a domicilio a madres y recién nacidos, salvó la vida de una madre y de su hija.

 
KONOBO, Liberia, 12 de mayo de 2016
– En el corazón profundo del condado de Grand Gedeh, Liberia, una recién nacida está en la cama del centro rural de salud de Konobo. Está envuelta en una lappa (paño tradicional de Liberia) y las enfermeras y comadronas acuden de vez en cuando a comprobar cómo se encuentra.

Una enfermera me explica que la bebé no respiraba al nacer y hubo que reanimarla. Como yo también soy doctora, sé lo importantes que son estos primeros minutos dorados de la vida de un bebé. Al colocar el estetoscopio sobre su pequeño cuerpo, escuché el latido de su corazón. Respiré aliviada; su ritmo cardiaco era de 110 pulsaciones por minuto.

La madre del bebé está acostada a su lado, pero está sangrando y tiene mucho dolor. Tras el parto ha tenido placenta retenida y todos los esfuerzos por ayudarla están fallando. De repente, se ha desmayado y ha sufrido una conmoción. Las enfermeras y parteras han podido reanimarla y estabilizarla, pero han decidido transferir a la madre y a su bebé al hospital principal de Zwedru, capital del condado, un centro mejor equipado donde recibirán cuidados avanzados.

El centro de salud de Konobo está a más de 50 kilómetros del hospital más cercano y sólo se puede acceder por una carretera escarpada y sin pavimentar. Incluso los todoterrenos tienen dificultad para circular por estas carreteras durante la estación seca, pero todavía es más duro hacerlo durante los seis meses de la estación de lluvias de Liberia, cuando las carreteras se convierten en un barro húmedo donde la mayoría de los vehículos quedan atrapados. Afortunadamente, hay una ambulancia disponible y la madre está siendo transportada rápidamente al hospital con su bebé, donde un equipo médico podrá retirar los restos de placenta retenida y hacerle una transfusión de sangre. A la bebé se le está suministrando oxígeno y a ambas se las controla periódicamente. Las dos sobreviven.
  

Revertir la tendencia de la mortalidad materna

Éste es solo un ejemplo de cómo una rápida actuación y un personal médico preparado pueden salvar las vidas de madres y recién nacidos. Aunque esto pueda ser una acción rutinaria en muchas partes del mundo, desgraciadamente no es tan frecuente en la Liberia rural. Con 1.072 muertes maternas por cada 100.000 nacimientos, Liberia tiene una de las tasas de mortalidad materna más elevada del mundo. La hemorragia es la principal causa de la mortalidad materna (el 25%). La tasa de mortalidad neonatal es de 26 bebés muertos por cada 1.000 nacidos vivos; uno de cada 11 niñas o niños de Liberia muere antes de cumplir un año. Sobre todo, son las niñas y niños de zonas rurales los más propensos a morir jóvenes, comparados con los de áreas urbanas.

Con el fin de revertir estas tendencias, UNICEF, en colaboración con el gobierno de Liberia y otros asociados, trabaja para aumentar el acceso y la disponibilidad de servicios de salud de máxima calidad y eficaces para madres y bebés. En asociación con el ministro de salud y los equipos sanitarios del condado, UNICEF imparte capacitación para la atención domiciliaria materna y del recién nacido y para ayudar a la supervivencia de los bebés. Entre los participantes se incluyen casi 550 parteras formadas tradicionalmente y voluntarios sanitarios de la comunidad no especializados de Grand Gedeh, Maryland, y de los condados de Sinoe (algunas de las zonas más desatendidas de Liberia).

UNICEF Liberia/2016

Una madre y su niña recién nacida son subidas a una ambulancia. El embarazo de la mujer era de alto riesgo, pero gracias a las medidas preventivas de una comadrona de su comunidad, ambas se salvaron. La madre pudo dar a luz en un centro de salud rural y luego, cuando presentó complicaciones, fue trasladada a un hospital provincial mejor equipado.

Las sesiones de formación se centran en crear la necesaria capacitación de los voluntarios sanitarios para identificar a las mujeres embarazadas y después animarlas a que tengan la oportuna atención médica prenatal y den a luz en centros de salud donde un personal especializado pueda ofrecerles los cuidados apropiados, como a la madre y al niño en Grand Gedeh. Estas parteras y los voluntarios sanitarios también promueven la asistencia posnatal y la lactancia materna exclusiva, y detectan cualquier signo alarmante en madres y bebés, de forma que puedan ser remitidos a centros de salud.

Además de ofrecer formación, UNICEF donó 19 ambulancias todoterreno para ayudar, en casos de emergencia, al traslado de madres, recién nacidos y niños procedentes de dispensarios rurales de difícil acceso hasta hospitales más grandes y mejor dotados en materia de salud. Una de esas ambulancias donadas por UNICEF fue la que ayudó a transportar a la madre y a la bebé desde el centro rural de salud de Konobo hasta el hospital principal de Zwedru.
  

Salvar vidas mediante medidas preventivas

Al día siguiente visitamos a la madre y a su hija en el hospital. Ya le está dando el pecho y tanto la madre como la bebé se encuentran bien.

El embarazo de esta madre fue de alto riesgo; tiene 39 años y esta niña era su noveno parto. Una comadrona fue quien la reconoció y animó a buscar atención prenatal y a dar a luz en un centro de salud.

La planificación anticipada y la preparación del personal sanitario garantizó el parto seguro de la bebé. De no haber sido reconocida con la suficientemente antelación, de no haber seguido los consejos de la comadrona y haber dado a luz en un centro de salud con personal especializado, o de no haber contado con una ambulancia que la transportara a lo largo de 55 kilómetros por terrenos llenos de baches hasta un hospital mejor equipado, ella y su bebé no habrían sobrevivido.
Ninguna madre debería morir al dar la vida a otro ser, y todo bebé tiene derecho a sobrevivir y desarrollarse.

  


La ayuda de UNICEF al sector de salud incluye el suministro anual de medicamentos y millones de dosis de vacunas. Tras el brote del virus del ébola, UNICEF ha contribuido a la recuperación del sector de la salud, especialmente en algunas de las zonas más vulnerables del sudeste de Liberia.