ASIA Y EL PACÍFICO Reportaje sobre Filipinas
© UNICEF Philippines/2009/Baraguir
Niños afectados por conflictos participan en una actividad extraescolar en un centro para desplazados en Lumpong. Es 1 de los 61 espacios acogedores que apoyan UNICEF y Community and Family Services International.
UNA ALIANZA HACE REALIDAD LOS SUEÑOS DE NENENG
LUMPONG, Filipinas, 8 de septiembre de 2009 – “A la hora de ir a la escuela, el sol está apenas por encima de los árboles”, explica Neneng, una estudiosa niña de nueve años de edad originaria de Tugal que ahora vive en el Centro de Evacuación de Desplazados de Lumpong. “La maestra dice que las clases comienzan a las ocho y media de la mañana. Recogemos nuestras cosas, nos cepillamos los dientes y salimos para la escuela”.
Hasta fines de agosto de 2008, Neneng estudiaba en la escuela primaria de Tunal, un pueblo de la provincia de Mindanao, en la región meridional del archipiélago filipino. Pero en esa época se desataron en Tunal y otras partes de Mindanao las hostilidades entre el Frente Islámico Moro de Liberación y las fuerzas armadas gubernamentales. El conflicto armado continuó durante 2009 y causó el desplazamiento de decenas de miles de pobladores y la destrucción de viviendas, escuelas y otras obras de infraestructura. Más de 9.000 personas huyeron buscando seguridad y refugio y se instalaron en el centro de evacuación de Lumpong.
El Gobierno de Filipinas1, UNICEF y su antiguo aliado, Community and Family Services International, figuraron entre los primeros organismos y organizaciones que prestaron servicios a los refugiados. Atentos a la necesidad de devolver a los niños y niñas la sensación de normalidad a la brevedad posible y de ayudarles a continuar su educación, UNICEF y Community and Family Services International establecieron 61 ámbitos acogedores para los niños, donde los alumnos primarios desplazados participan en actividades educacionales y recreativas y reciben apoyo psicosocial. Ambas organizaciones crearon también 61 aulas provisionales para los estudiantes secundarios.
Una vez más, la alianza logró los resultados esperados. En la actualidad, más de 8.000 niños y niñas asisten diariamente a los ámbitos acogedores para los niños y las aulas provisionales que funcionan en Lumpong y otros 59 centros de evacuación. La educación que reciben Neneng y sus compañeros es de primera calidad, ya que la escuela del centro de evacuación de Lumpong está a punto de obtener la certificación que la habilita como establecimiento oficial de enseñanza.
La colaboración de UNICEF y Community and Family Services International en el marco de esta crisis humanitaria es ejemplo de la manera en que esta alianza de nueve años de antigüedad da respuestas oportunas, eficaces y de buena calidad a las situaciones de emergencia. UNICEF aporta a esa alianza su capacidad técnica y su experiencia en materia de coordinación de las labores del sector humanitario a nivel nacional y mundial, mientras que Community and Family Services International, que tiene su sede en Filipinas, contribuye con conocimientos adicionales y una larga experiencia de trabajo en las comunidades locales.
Steven Muncy, Director Ejecutivo de Community and Family Services International, destaca la importancia de la alianza con UNICEF. “Me impresiona la manera en que UNICEF se relaciona con sus aliados”, comenta. “El proceso de consulta es permanente, y organizamos de manera conjunta visitas sobre el terreno de dirigentes políticos, colaboramos en la elaboración y presentación de propuestas y cooperamos estrechamente en la planificación y ejecución de los proyectos”.
Se espera que en 2010 el programa se amplíe, de manera que atienda las necesidades de más de 30.000 niños y niñas por día en los demás centros evacuación, así como en las escuelas que, debido al conflicto armado, no reciben los servicios que le corresponden ni cuentan con los recursos que necesitan.
Neneng, que vive desde hace un año en el Centro de Evacuación de Lumpong, pronto terminará el tercer grado. Gracias a la ayuda que recibe de la alianza de organizaciones humanitarias, la niña habrá avanzado un paso más hacia la concreción de su sueño de ser enfermera.
La Oficina de UNICEF en Filipinas colabora estrechamente con el Gobierno y más de 80 aliados en las labores de prestación de servicios sanitarios de emergencia, de protección de la infancia, de educación, de nutrición y de suministro de agua, saneamiento e higiene.
1Entre los diversos aliados gubernamentales figuran el Departamento de Bienestar Social, el Departamento de Educación, el Departamento de Salud y el Consejo Nacional de Coordinación en Situaciones de Desastre.