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ÁFRICA OCCIDENTAL Y CENTRAL LIBERIA: REPORTAJE

© UNICEF Liberia/2008/Adolphus

Baindu Gborlue sostiene a su hijo, de 1 año de edad, que se recupera después de haber padecido desnutrición aguda en el centro de alimentación terapéutica VOA en Brewerville, Virginia, cerca de Monrovia, la capital.

EN LIBERIA, LA DESNUTRICIÓN VA DE LA MANO DE LA INSEGURIDAD ALIMENTARIA

Momoh tiene un año de edad, pero como ha bajado mucho de peso sólo aparenta la mitad. Sin embargo, se trata  de un niño afortunado, ya que a pesar del estado crítico en que se encontraba sobrevivió el difícil viaje hasta el centro de alimentación terapéutica VOA, que se encuentra en Brewerville, Virginia, en las afueras de Monrovia. "Está a salvo", comenta su joven madre, Baindu Gborlue, que le mira casi con incredulidad, ya que el niño estuvo a punto de morir de desnutrición aguda.

Los elevados precios de los alimentos han causado preocupación en Liberia, debido a que la mitad de las importaciones del país consiste en alimentos y combustibles. Un 60% del arroz, que es el alimento principal, es importado. En la capital, Monrovia, y en sus alrededores, la proporción de arroz importado se acerca al 95%. Más de dos terceras partes de los liberianos viven por debajo del umbral de pobreza con un ingreso diario de menos de un dólar, mientras que el 48% vive por debajo del umbral de pobreza extrema. Debido a ello, más de la mitad de los ingresos familiares se emplean para adquirir alimentos. El 39,2% de los niños y niñas menores de cinco años sufren desnutrición crónica. Un 8% de ese sector de la población tiene desnutrición aguda debido a la pérdida reciente de peso como resultado de enfermedades o de la escasez de alimentos. Entre los sectores más vulnerables de la población figuran los pobres, especialmente los que no producen sus propios alimentos y cuyos ingresos dependen del empleo provisorio o del comercio o trueque en pequeña escala; las mujeres embarazadas/lactantes; los niños y niñas, y las personas que viven con el VIH/SIDA.

En Liberia, sólo una tercera parte de los niños y niñas menores de seis meses recibe leche materna de manera exclusiva. La situación nutricional de los niños se ve afectada por creencias falsas y prácticas erróneas acerca de la lactancia materna. El Gobierno de Liberia y sus aliados colaboran para contrarrestar esas creencias negativas. "Liberia tiene una tasa muy baja de iniciación temprana del amamantamiento, especialmente entre las madres adolescentes", explica la Sra. Jestina Johnson, coordinadora de esa cuestión sanitaria en el Ministerio de Salud y Bienestar Social. "Un 60% de las madres liberianas no amamanta a sus hijos desde el nacimiento. Ese es el gran desafío que confrontan el Gobierno y sus aliados. Es necesario educar a las madres sobre la importancia de amamantar de inmediato a sus hijos. Junto al paludismo, la desnutrición es la principal causa de mortalidad de los niños y niñas menores de cinco años en Liberia".

"Comencé tarde a amamantar a mi hijo", cuenta Baindu. "Me parecía que mi leche no era suficiente para alimentarle debido a que yo sólo comía bulgur con aceite, ya que no tenía acceso a otros alimentos. Después de un tiempo, mi hijo tuvo diarrea grave, y uno de los agentes sanitarios de mi comunidad me dijo que lo trajera a este centro de alimentación terapéutica. Gracias al personal de este centro, mi hijo disfruta ahora de buen estado de salud".

Con frecuencia, sólo se lleva a los niños y niñas a las clínicas y hospitales cuando ya se encuentran en estado crítico y sufren emaciación grave debido a la desnutrición o porque tienen infecciones. UNICEF suministra leche terapéutica (F100) y galletas de alto contenido energético (BP5) a los niños y niñas gravemente desnutridos, así como incentivos al personal de los centros; vehículos, suministros médicos esenciales y mosquiteros tratados con insecticida. Las personas a cargo de los niños y niñas que reciben tratamiento obtienen arroz y suplementos alimentarios del Programa Mundial de Alimentos (PMA). UNICEF también aporta al centro un generador eléctrico y combustible para el mismo.

El centro de alimentación terapéutica es uno de los cinco centros que reciben apoyo del PMA y de UNICEF. El centro también recibe casos remitidos desde los condados de Gbarpolu, Cape Mount y Bomi. En 2006, recibieron tratamiento 690 niños y niñas gravemente desnutridos y 1.321 moderadamente desnutridos. En 2007, se brindó alimentación suplementaria a 709 niños y niñas gravemente desnutridos y a 2.263 menores moderadamente desnutridos. En 2008, dos de los centros registraron un aumento de un 40% del número de casos de niños gravemente desnutridos.

En colaboración con el Ministerio de Educación, UNICEF ha reactivado un programa de eliminación de parásitos dirigido a los alumnos de escuelas de todo el país. También se suministra a nivel nacional suplementos de vitamina A., mientras que en comunidades escogidas se llevan a cabo actividades de vigilancia y fomento del crecimiento. Con el objetivo de mitigar las consecuencias de los precios de los alimentos se ha elaborado una estrategia coordinada que contempla la aplicación de labores de vigilancia de la alimentación a nivel nacional; la ampliación del acceso a los tratamientos tanto en los establecimientos sanitarios como en las comunidades a fin de que las tasas de desnutrición aguda no superen niveles críticos; el refuerzo de las actividades destinadas a fomentar el amamantamiento exclusivo y la alimentación complementaria adecuada en la primera infancia, y el aumento del nivel de acceso de los niños, niñas y mujeres embarazadas y lactantes a los servicios de prevención y reducción de la carencia de micronutrimentos.