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ÁFRICA ORIENTAL Y MERIDIONAL ETIOPÍA: REPORTAJE

Refugio para las víctimas de inundaciones en la región de Amhara

© UNICEF Ethiopia/2007/Berhan

Tinsae Berhan conversa con un miembro de UNICEF en el campo de personas desplazadas internas (PDIs) de Shoble, que acoge a 10.000 personas.

“No pudimos hacer nada para detener las repentinas inundaciones, pero con la asistencia de UNICEF reconstruiremos nuestra pequeña explotación agrícola.”

Tinsae Berhane se sienta fuera de la tienda que le ha sido asignada, su rostro y sus ojos reflejan cansancio. “El dique de nuestra aldea se rompió en mitad de la noche,” recuerda Tinsae, “no pudimos hacer nada para detener la inundación. Por la mañana, el trigo, el mijo y el sorgo se encontraban bajo el agua. Mis hijos y yo intentamos desesperadamente proteger la casa, pero el agua seguía subiendo. No podíamos adivinar qué nos depararía el mañana.”

Tinsae abandonó su hogar y su pequeña parcela de tierra cercana a las orillas del lago Tana, en el corazón de la región etíope de Amhara. Colocó a su hija menor sobre su espalda sujetándola con una correa y se llevó todos los artículos que pudo reunir antes de caminar sobre las aguas de las inundaciones en busca de un terreno de mayor altura y del refugio construido con la ayuda de UNICEF.

Las lluvias torrenciales anegaron los endebles terraplenes y diques de tierra en docenas de asentamientos desperdigados alrededor de los crecidos afluentes del lago. Tinsae se unió a otros casi 10.000 desplazados en Amhara, cuyas vidas dependen de la disponibilidad de alimentos, medicamentos y refugio.
 
“Cuando a alguien de nuestra aldea le empiezan a ir mal las cosas, solemos contribuir para prestarle ayuda,” dice Tinsae, “pero estas inundaciones ya se han producido en dos ocasiones y nos han afectado a todos. Nadie puede ofrecerme ni a mí ni a cualquier otra persona comida o dinero. Mis cultivos han permanecido una semana bajo el agua y ahora son inservibles – tenemos que empezar desde cero-.”

Trabajadores sanitarios del gobierno y el encargado de UNICEF, Mengistu, ayudaron a Tinsae a registrarse en el refugio. “Nuestro apoyo es decisivo para el bienestar de estas personas,” dice Mengistu. “Se precisan urgentemente suministros de emergencia, tales como medicamentos, baterías de cocina, materiales de refugio, así como instalaciones de agua y saneamiento, con el fin de satisfacer las necesidades urgentes de las familias desplazadas por las inundaciones en la región de Amhara y en otros lugares. Trabajamos con aliados como el Programa Mundial de Alimentos, Médicos sin Fronteras y la Cruz Roja.”

“No le temo al futuro, mi familia reconstruirá nuestra pequeña explotación agrícola para asegurar nuestra supervivencia,” dice Tinsae. Afortunadamente, con la asistencia de UNICEF, la familia regresará sin que falte un solo miembro.